Comunicación inteligente en lugar de silos cerrados
Hoy en día, sigue siendo un estándar generalizado que la gestión de quirófanos, la gestión de almacenes y el reprocesamiento funcionen juntos, pero solo están muy inadecuadamente vinculados entre sí en términos de comunicación. Aquí es donde entra en juego la gestión de suministros quirúrgicos: Todos los sistemas están sincronizados y la comunicación es transparente. En concreto, esto significa que el elemento central sigue siendo la gestión del quirófano, es decir, la planificación a largo y medio plazo de procedimientos electivos. Para ello, la demanda se registra a través del software correspondiente y se transmite a la gestión del almacén. Los recursos necesarios, y solo estos, se entregan al quirófano a tiempo. Esto funciona porque el almacén ya no proporciona equipos quirúrgicos estándar, sino que los monta según las necesidades. El reprocesamiento posterior está igualmente estrechamente relacionado. Una vez finalizada la operación, los instrumentos contaminados se recogen y se esterilizan a tiempo. Lo mismo se aplica a las prótesis no utilizadas. La documentación, que hoy en día aún debe realizarse de forma manual y posterior, se registra automáticamente de forma digital. Resumiendo: Todos los procesos secundarios relacionados con la operación están interconectados y pueden ser vistos de forma descentralizada y, en algunos casos, de forma móvil por todas las personas autorizadas. Esto significa menos espera y menos redundancia. En su lugar, todo está en el lugar correcto en el momento adecuado.
