La hemodiálisis es un procedimiento multifacético. Debido al alto nivel de complejidad y a la escasez actual de personal de enfermería, es crucial optimizar los procesos tanto como sea posible. Igualmente importante es reducir la carga de trabajo del personal de enfermería que desempeña un papel importante en la diálisis. Al fin y al cabo, una menor carga de trabajo puede significar más tiempo para cuidar atentamente al paciente. Así, cada proceso de trabajo simplificado puede contribuir a un mejor entorno de trabajo: La manipulación de los nuevos envases, mucho más sencilla, afecta al bienestar del personal sanitario, a la vez que genera menos residuos y reduce el impacto medioambiental.

Sol-Can® A puede ayudar a reducir el impacto medioambiental

La diálisis afecta a nuestro planeta. Uno de los problemas más urgentes en el proceso de diálisis puede ser el uso de envases de plástico que contienen el concentrado ácido. Estos envases no son biodegradables y terminan en vertederos, donde tardan cientos de años en descomponerse. Su producción consume combustibles fósiles y aumenta las emisiones de gases de efecto invernadero que pueden contribuir al cambio climático.
Por lo tanto, debemos tener en cuenta el impacto de la diálisis en el medio ambiente y buscar soluciones más sostenibles. Una posibilidad es cambiar a envases con menos plástico. Esto puede reducir la cantidad de residuos plásticos generados durante la diálisis.