Entrenamiento de resistencia: comienza con pequeños pasos para mantenerte en forma
Los deportes de resistencia no tienen por qué ser necesariamente extenuantes. Puedes y debes ajustar siempre la intensidad de tu entrenamiento. También puedes combinar las tareas domésticas con actividades como la jardinería o la limpieza.
¡Coordina siempre tu programa de entrenamiento con tu equipo de atención sanitaria antes de comenzar por tu cuenta!
Nota: si eres capaz de hablar durante el entrenamiento, se considera que realizas una actividad física suave. El entrenamiento es moderado cuando comienzas a respirar más deprisa, y es intenso cuando no puedes hablar.
Ajusta constantemente la intensidad de tu actividad mediante la autobservación; por ejemplo, con una aplicación de seguimiento en un teléfono o reloj inteligente, una pulsera de actividad o dispositivos similares, y no olvides pedir más información a tu médico o fisioterapeuta.
Ejemplos de ejercicios:
- Marcha rápida
- Trote/carrera
- Baile
- Natación
- Ciclismo
- Subir escaleras
- Practicar deportes como el tenis, pádel, baloncesto o fútbol
Recomendación: 30 min 3 veces por semana