Sra. Zhiznevskaya, ¿cómo sabe que está dispuesta a cambiar?
Como enfermera jefe, para mí es muy importante que nuestros pacientes puedan vivir no solo una larga vida, sino también una vida satisfactoria, a pesar de su grave enfermedad. Para poder garantizar esto en el futuro, debemos seguir mejorando el nivel de atención en nuestro hospital, pero esto solo se puede lograr si estamos preparados para cambiar y crecer con nuevos retos: el aprendizaje nunca se detiene. Por eso agradezco enormemente la estrategia B. Braun - The Next Decade y me complace poder participar en ella implementando concienzudamente innovaciones en la atención al paciente.
¿En qué áreas es más perceptible el cambio?
Para B. Braun Avitum Russia Clinics, la digitalización desempeña un papel importante y, al mismo tiempo, es el mayor obstáculo al que nos enfrentaremos en la próxima década. Esto se debe a que muchos enfermeros y enfermeras carecen de experiencia en el manejo de procesos digitales y les resulta difícil entusiasmarse con ellos.
¿Qué contribución le gustaría hacer a la estrategia B. Braun - The Next Decade?
Para mí es importante que el personal de la clínica entienda que estamos tomando estas medidas por el bien de nuestros pacientes. Creo que si solo quieres lo mejor para los demás, el cambio es mucho más fácil. Actualmente estoy aprendiendo a utilizar un nuevo programa gráfico para crear diagramas y transferir procedimientos operativos estándar, como los de sanitización, del papel al digital. Sin duda, se trata de un cambio positivo, pero se necesita mucho tiempo para aprender las cuerdas, por lo que tenemos que ser pacientes hasta que realmente podamos ver el cambio en los centros de diálisis. Pero estoy segura de que una vez que tengamos todo preparado y los cimientos necesarios, mejorará en gran medida nuestro servicio.
¿Dónde ve la necesidad de realizar cambios adicionales?
El creciente uso de la inteligencia artificial para mejorar la diálisis será especialmente emocionante: la presión arterial, el volumen de líquidos y la dosis de diálisis se controlarían aún mejor. Espero ver muchos cambios positivos en esta área en los próximos años. Donde también deberíamos actualizar: en Rusia, actualmente hay 83 centros de diálisis gestionados por B. Braun. Pero solo dos de ellos están conectados a una unidad quirúrgica con quirófano en su composición, donde se forma o reconstruye el acceso vascular de los pacientes. Además, uno de los centros cuenta con un pequeño departamento de hospitalización. Respecto a éste último, creo que es extremadamente importante que los pacientes que requieren cirugía tengan la oportunidad de recibir diálisis mientras se recuperan de la cirugía. Por lo tanto, me gustaría ver que en el futuro podremos conectar aún más centros a los hospitales.
